Hoy utilizamos el mismo patrón que ayer: pantalones, top liso y blazer estampado. Empezaré por los pantalones (¿Qué me pongo yo?). Las prendas de polipiel están en la cima del éxito, una temporada más. Sabéis que a veces este tejido cede y deja de quedar ajustado. Lo bueno que tienen los pantalones que os traigo hoy es que sólo por delante son de este material, siendo toda la parte trasera encerada. Así, el efecto es básicamente el mismo, con la ventaja de que va a quedar siempre igual de ajustado. Constituye todo un básico para el otoño/invierno, y queda bien con prácticamente todo.
La conjugación de blanco y negro sabemos que nunca falla. Se mantiene impasible al paso de los años. Así que suele ser una combinación acertada para una cita de cierta formalidad en la que no podemos arriesgarnos a causar una mala impresión. Lo mismo ocurre con los clásicos salones negros.
Una americana como ésta empasta a la perfección con el look y lo remata de forma elegante. Con este print animal de cebra le damos el toque moderno pero sin pasarnos. Y el color lo aportamos con la cartera de mano y el collar, ambos con ornamentos dorados.
Pienso que estas gafas de estética lady, de aire vintage y en blanco iban a resaltar más que otras. Así que aposté por ellas. Y ya sabéis, las uñas siempre a punto. ¡Hasta mañana!
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