Las faldas lápiz son una buena opción para cuando te sale un compromiso y de repente no sabes qué ponerte. Si tienes varias, sea cual sea su estampado, suele quedar bien con una camisa blanca, con las mangas un poco remangadas, eso sí. Después sólo tienes que jugar con los complementos. Yo me puse las cuñas del outlet de CAROLINA BRISACH. Son altas pero muy cómodas y con una estética vintage que me encanta. Además, el amarillo es el color del verano. Sobre en color crudo y collar de eslabones, que realza cualquier look.
Para rematar, gafas de sol con las patillas amarillas.
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